Santuario Divino Niño

Cuenta uno de los colonos el señor Francisco Quintero que cuando el conflicto colombo peruano él prestaba servicio militar y los enviaron abrir esta vía a pica y pala, fue ahí cuando conoció a la señora que había colocado la primera imagen en el año de 1932, a su esposo lo habían asesinado junto con su hijo debajo de la piedra, por eso había colocado esa imagen para que siempre alumbrara el sitio. Los vehículos empezaron a transitar hacia el año de 1945 y eso fue deteriorando la imagen, en el año de 1948 un conductor tuvo un accidente en el antiguo puente de palo, se encomendó al Divino Niño cuando el carro empezó a rodar, el señor llego al abismo sin rasguño alguno, en acción de gracias cambio la imagen que estaba en la piedra. El 27 de agosto de 1989 la señora Ligia Contreras manda a celebrar la primera misa que fue oficiada por el sacerdote José Luis Álzate, asistieron 120 personas desde esa fecha se siguió  celebrando la misa el primer domingo del mes. La primera peregrinación se llevo a cabo el primer domingo del mes de octubre de 1989. A consecuencia de las inclemencias del tiempo 2 misioneras tuvieron la idea de la construcción de una pequeña capilla, sin dar espera en febrero de 1990 comenzaron a tramitar el permiso para la construcción el diseño fue realizado por el Arquitecto Rafael Alberto Farieta, (Q.E.P.D.), la obra la dirigió el ingeniero Pedro Antonio Farieta Gasca. En Junio de 1990 al completar las nueve peregrinaciones monseñor Fabián Marulanda López asistió para bendecir la primera piedra. El monto económico total de esta obra en ese tiempo fue calculado en $19.400.000, dinero donado por los transportadores de esta carretera, misioneros e infinidad de devotos caqueteños. Este templo es una hermosa unión de muchos granitos de arena de mano en mano, de corazón en corazón que permitió construir un centro de oración y devoción. El Santuario El Divino Niño, cuenta con una capacidad de recibir  a 500 personas aproximadamente.

Fuente: IDCTC